Sufrimiento o pérdida de bienestar fetal: qué es, cuáles son sus síntomas y qué lo ocasiona
Durante el embarazo y el parto, es importante llevar un control
prenatal, con el fin de verificar la salud y el bienestar del binomio madre e
hijo y para identificar la presencia de alguna complicación.
Una de las complicaciones más graves que puede presentarse durante el
parto, y que incluso puede aparecer desde el embarazo, aunque con menor
gravedad, es el sufrimiento fetal.
Qué es el sufrimiento fetal
El sufrimiento fetal, también llamado pérdida de bienestar fetal o
distrés fetal, es una peligrosa
complicación del parto en la que el bebé no recibe el oxígeno necesario,
y que podría ocasionar daños irreparables en el tejido cerebral, por lo cual es
importante actuar con rapidez, tomar las medidas necesarias para proteger la
salud del bebé.
Los síntomas que
podrían indicar que el bebé está presentando sufrimiento fetal son:
·
Cambios preocupantes en
la frecuencia cardiaca del bebé,
como un aumento o disminución, especialmente durante y después de una
contracción.
·
Presencia de meconio en el líquido amniótico.
(El bebé se hizo popó)
·
Disminución de los
movimientos del bebé sentidos por la
madre.
·
Acidosis
fetal
Dependiendo de la gravedad de cada
caso y de lo que se analice, se
decidirá qué hacer para proteger la salud y vida del bebé. En
algunos bastará con que la madre cambie de posición o se le coloque oxígeno y
así se pueda continuar con el parto por vía vaginal, pero en casos graves o si
la situación no mejora, se deberá realizar una cesárea de urgencia.
Tipos de sufrimiento fetal
Aunque es más común escuchar o
saber de ésta complicación durante el parto, tal y como lo hemos mencionado,
también es posible que éste se presente desde el embarazo. Por lo tanto,
estaríamos hablando de dos
tipos de sufrimiento fetal: agudo y crónico.
El sufrimiento fetal agudo se
considera una urgencia médica, ya que se presenta de forma repentina y durante
el parto, cuando la falta de oxigenación del bebé ocurre de forma brusca. En
estos casos, el nacimiento del bebé debe suceder lo más pronto posible, ya sea
por cesárea de urgencia o por vía vaginal, bajo vigilancia médica de
especialista.
El sufrimiento fetal crónico se
produce de forma gradual durante el embarazo. Éste no se considera una urgencia
o emergencia, ya que, al ocurrir progresivamente, el bebé se adapta a las
condiciones en las que se encuentra. En estos casos, se busca intentar corregir
la situación que lo está ocasionando, para permitir que el bebé siga madurando
hasta alcanzar un desarrollo y tamaño saludables para su nacimiento.
Causas y factores de riesgo
El sufrimiento fetal puede producirse por diversos motivos:
·
Lesiones o alteraciones
en la placenta.
·
Algún problema circulatorio de la madre que
altera la calidad o la cantidad de sangre que intercambia con el futuro bebé,
como hipertensión o preeclamsia.
·
Crecimiento intrauterino retardado.
·
Problemas con el cordón
umbilical.
·
Problemas del feto:
anemia fetal y anomalías cardíacas (como arritmias).
·
Fiebre materna durante
el parto.
·
Compresión de la vena
cava debido a la postura de parto de la madre.
·
Infecciones.
Además, existen algunos factores que podrían aumentar la
posibilidad de presentar sufrimiento fetal. Entre ellos se
encuentran los siguientes:
·
La edad de la madre: tener
menos de 20 años y más de 35.
·
Ser el primer parto o
haber tenido muchos partos previos.
·
Que la madre
padezca hipertensión
o diabetes.
·
Tener antecedentes de
muerte fetal, prematuridad o malformaciones.
·
Que el parto suceda en
las semanas posteriores a la fecha probable de parto.
·
Malformaciones
uterinas.
Cómo
se puede prevenir
Debido a que el sufrimiento fetal
suele ocurrir de forma repentina, no es algo que realmente pueda evitarse. Sin
embargo, si la mujer presenta factores de, se debe estar más al pendiente de la evolución
del embarazo, para detectarlo a tiempo.
Gracias a la tecnología hoy en día
es menos probable que el bebé pueda llegar a un sufrimiento fetal, de ser así
las secuelas podrán ser inmediatas o manifestarse en los primeros años de vida,
y éstas dependerán de la zona del cerebro que se haya dañado.
Recuerda la importancia de los
controles prenatales, su objetivo es prevenir,
orientar, disminuir los factores de riesgo, detectar problemas de salud y
tratarlos a tiempo, cuidando así de la salud de la madre y del bebé.
Comentarios
Publicar un comentario